Hace rato no actualizaba este blog y he querido retomar el tema con algo que nos viene rondado desde hace rato por la cabeza y hace de la vida diaria una pequeña tortura. La duración de las batería de nuestros teléfonos inteligentes. Personalmente no me satisface mucho el hecho de que la batería de mi LG Optimus One no dure lo suficiente para llegar a la siguiente mañana con disponibilidad de datos y poder llamar.
Los fabricantes cada vez mas se preocupan por este tema y han dispuesto toda clase de tecnologías para mejorar y optimizar el proceso de carga y su duración. Desde la aparición del concepto del celular en manos del Capitan Kirk de viaje a las Estrellas hemos visto una revolución en cada cosa que hace un celular: Permiten comunicación de voz, mensajes de texto, envío de archivos vía BlueTooth, reproducción multimedia, grabación de audio, fotografía, video, instalación de aplicaciones avanzadas, altas resoluciones en pantalla, fidelidad de audio y un largo etcetera.Al final la batería es la que asume las consecuencias, la cual no ha tenido mayores cambios tecnológicos con el paso de los años y lo normal es que con tal carga operacional de los equipos de hoy en día, las baterías ya no aguanten más que unas cuantas horas.
En los últimos meses se ha venido hablando de la necesidad de crear sistemas de carga inalámbricos, algunos celulares ya vienen con celdas solares que les dan un poco más de autonomía, planean cargar equipos con el calor de nuestros cuerpos humanos incluso, todo para que podamos cumplir con las expectativas de funcionalidad casi ilimitada. Faltará ver en el futuro próximo y con las mejoras que promete la nanotecnología a ver si no cargaremos nuestros celulares de formas bastante inverosímiles.
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